Un texto argumentativo tiene por finalidad convencer al lector en base a un razonamiento que se caracteristiza por ser solido. Los argumentos constituyyen, por tanto, una manera coherente y organizada de presentar una idea sobre un tema en concreto.
Estos textos se utilizan en una amplia variedad de situaciones, desde ensayos literarios hasta textos legales y publicitarios. El objetivo principal de los textos argumentativos es presentar una tesis o argumento sólido y convincente, respaldado por evidencia o razones lógicas. En este artículo, se explorará en profundidad los diferentes tipos de textos argumentativos, sus características y cómo se utilizan para persuadir a los lectores o audiencia. Además, se analizarán las técnicas retóricas comunes utilizadas en los textos argumentativos y cómo pueden influir en la forma en que se percibe el mensaje.
Ensayos literarios
Son textos que presentan una tesis o argumento sobre temas literarios, filosóficos o sociales, a menudo de manera más subjetiva e imaginativa que otros tipos de textos argumentativos. Ejemplo:
«La lectura es para mí una forma de escape, de libertad, de vivir otras vidas y de sentir emociones que de otro modo no experimentaría. La literatura nos permite expandir nuestros horizontes y ver el mundo con otros ojos».
Artículos periodísticos
Son textos argumentativos que aparecen en periódicos y revistas, y que tratan sobre temas de actualidad. A menudo se enfocan en persuadir al lector sobre un punto de vista particular sobre un tema en particular. Ejemplo:
«La pandemia de COVID-19 ha revelado las desigualdades sistémicas en nuestra sociedad. En lugar de simplemente volver a la normalidad, debemos aprovechar esta oportunidad para reconstruir un mundo más justo y equitativo para todos».
Este fragmento es argumentativo porque presenta una tesis o argumento, que es la afirmación de que la lectura es una forma de escape, de libertad y de expandir nuestros horizontes. La oración comienza con la afirmación «La lectura es para mí…», que establece una posición personal y subjetiva, y luego se presentan una serie de argumentos para apoyar esa posición, tales como el hecho de que la literatura permite vivir otras vidas y sentir emociones que de otro modo no se experimentarían. El autor está intentando persuadir al lector de que la lectura es importante y valiosa, y está presentando argumentos para respaldar esa afirmación.
Textos legales:
Son textos que utilizan un lenguaje técnico y formal, y que a menudo presentan argumentos para defender o refutar una posición legal en un juicio o proceso legal. Ejemplo:
«El acusado presentó evidencia de que no se encontraba en la escena del crimen en el momento en que ocurrió. Por lo tanto, no se puede concluir con certeza que haya sido el responsable del delito».
Textos publicitarios:
Son textos que intentan persuadir al lector o espectador para que compre un producto o servicio en particular. A menudo utilizan técnicas retóricas para crear un sentido de necesidad o deseo en el consumidor. Ejemplo:
«Nuestro nuevo detergente elimina las manchas más difíciles, y deja su ropa fresca y limpia. ¡No se conforme con menos! Compre nuestro detergente hoy mismo y experimente la diferencia».
Textos científicos:
Son textos que presentan argumentos basados en evidencia empírica y datos cuantitativos. Estos textos a menudo siguen un formato específico y utilizan un lenguaje técnico y preciso para presentar sus argumentos. Ejemplo:
El estudio demuestra que el uso prolongado de dispositivos móviles puede afectar negativamente la salud visual de las personas, causando fatiga ocular y síntomas de sequedad ocular. Los resultados sugieren que es importante limitar el tiempo de exposición a pantallas y tomar medidas preventivas para mantener una buena salud ocular».