Un ensayo tiene por función argumentar sobre un tema y convencer así al lector. Es decir, por un lado, se habla de una determinada herramienta (los argumentos) para llegar a un fin (convencer)
No se trata de una simple opinión. Se trata, más bien, de una opinión argumentada.
Un ensayo es una exposición de argumentos propios
Escribir un ensayo es hablar de uno mismo a través de los argumentos.¿Qué implica eso? El ensayista muestra su lado personal, no necesariamente describiendose a si mismo, sino, se describe a través de lo que piensa acerca de algo.
Es decir, al leer su obra, conocemos por un lado las ideas, pero las ideas también nos lleva a conocer a la persona.
Definición de ensayo en los diccionarios
Escrito en prosa en el cual un autor desarrolla sus ideas sobre un tema determinado con carácter y estilo personales. Diccionario de la Real Academia Española
Obra literaria en prosa, generalmente de corta extensión, en la que el autor expone sus propias ideas acerca de un asunto o tema general, pero sin la extensión y aparato de un tratado. Diccionario Lexico de la Universidad de Oxford
Las tres funciones de un ensayo: Argumentar, demostrar y persuadir
Tres palabras que definen precisamente lo que todo ensayo se propone: Primero, hablar y explicar un tema, utilizando para ello los argumentos, ya sean a favor o en contra. La argumentación bien construida se convierte en una demostración, que, finalmente, una vez asimilada por el lector, le puede persuadir de todo o en parte de las ideas desarrolladas por el autor del ensayo
Argumentar
El diccionario de la Real Academia España define argumentación de la siguiente manera: aducir y alegar.
Un argumento es la estructura de un razonamiento determinado. Compuesto por partes para llegar a una conclusión.
Demostrar
Demostrar es probar. A través de la teoría expuesta en los argumentos, el ensayista trata de probar que su idea o razonamiento es comprobable, y por tanto, una verdad.
Persuadir
La persuasión es la consecuencia de un razonamiento bien elaborado, demostrable y por tanto, convincente. El lector es seducido por la habilidad del ensayista que supo estructurar su teoría de una manera ordenada y sistema.
Al respecto, Gómez- Martínez, conocido autor y estudioso del ensayo, expresa que «el ensayista busca influir en la opinión del lector; pero no lo hace dando ideas hechas (como en un tratado o como en las obras didácticas). El ensayista desea que el lector adopte su modo de pensar (o lo comprenda como un posible modo de pensar).
Escribir un ensayo es arte de convencer
Escribir un ensayo argumentativo que tenga el poder de convencer es todo un arte. El autor debe saber plasmar su propio estilo, de seducir al lector con sus ideas y en especial en la manera en que transmite esas ideas.
Tradicionalmente se afirma que el ensayo tiene la finalidad de convencer al lector de los argumentos que alli se presentan. Sin embargo, técnicamente, el ensayo es solo el reflejo de lo que su autor piensa. Es el engranaje interno de sus pensamientos sobre practicamente cualquier tema que se le pueda ocurrir.
En el exposición natural de lo que el autor cree verdadero o al menos, digno de ser tomado en cuenta, y sumado al estilo con lo que haga escribiendolo, el lector decidirá si se deja o no convencer. El ensayista se muestra tal como es. O mejor dicho, «tal como piensa» y ya dependerá del lector, que parte acepta o rechaza de las ideas que el ensayista le propone.
Referencias
José Luiz Gómez- Martinez: Teoría del ensayo.